Más solos que la una

Puestos a elegir, en invierno, prefiero los días nublados, en los que ha llovido durante la noche anterior, e incluso por la mañana aun persiste un ligero orvayo nada molesto. Y elijo esos días frente a otros soleados porque en éstos te congelas a primera hora pero te sobra la mitad de la ropa a media mañana. Sin embargo, en días como hoy la temperatura se mantiene constante y suele ser más alta que en días despejados. Además no suele hacer viento, todo es más calmado, más uniforme. Pero aun hay más ventajas: el grueso de los aficionados no sale en días como hoy, con lo que los caminos, pistas y trialeras se abren para nosotros solos. Lo mejor en cualquier caso es que no tienes que pasarte la mañana saludando a los que te cruzas ("¿que hay?", "hola", "buenos días", "vamos", etc.). Sinceramente, el compañerismos entre bikers está muy bien, pero cuando llevas tres horas saludando empieza a ser cansino cuanto menos.

Hoy ha sido uno de estos ideales días. Sólo nos hemos cruzados con tres runners y visto de lejos a dos bikers. Ideal. Un día ideal. ¿Qué voy a decir yo, que era el segundo día con mi nueva burra? Por cierto, una pasada. Y lo hemos disfrutado Maigo, Trípode, Peli, Peluso y yo, recorriendo pocos pero gratificantes kilómetros (18,10) por la ruta de los Cortados de "El Piul".

Lo peor del día ha sido el barro que hemos encontrado en cuanto las pistas han dejado de tener piedras en su trazado (aunque en realidad viendo cómo hemos disfrutado, sería algo que podrían decir nuestras burras y no nosotros).

En fin, que vengan otros días así.